Historia de Hoyo de Manzanares
El presente es el resultado necesario de todo el pasado, la causa necesaria de todo el futuro
Robert Green Ingersoll

Antiguo desvío a Hoyo de Manzanares


Las noticias más antiguas de Hoyo de Manzanares han surgido hace menos de una década. Bajo la cubierta vegetal de La Cabilda, en el Yacimiento Arqueológico del mismo nombre, aparecieron las construcciones del primer núcleo de población que fue Hoyo. Un enclave visigodo, datado en torno al siglo VII, con casas de piedra cubiertas de madera y teja; un enclave rural en el que los vestigios nos hablan de una sociedad ganadera ligada al entorno natural. Sin embargo poco se sabe del poblamiento serrano en este periodo y las referencias históricas se pieden hasta muchos siglos despúes. Te recomendamos hacer una visita a este Yacimiento para conocer mucho más acerca de cómo vivían nuestros primeros vecinos.



Durante la Edad Media toda la Sierra de Guadarrama fue un territorio muy disputado entre los madrileños y los segovianos por su riqueza en pastos, leña y otras materias primas. Para acabar con las disputas, Alfonso X El Sabio lo segregó en favor de si mismo creando el “Real de Manzanares”, al que Hoyo de Manzanares pertenecía junto con otros imporantes municipios del entorno como Colmenar Viejo, Chozas de la Sierra (actual Soto del Real), Manzanares el Real, Porquerizas (actual Miraflores de la Sierra), Navacerrada, Guadalix de la Sierra, Moralzarzal, Cerceda, El Boalo, Cercedilla, Mataelpino, Collado Mediano, Collado Villalba, Alpedrete, Becerril de la Sierra, Galapagar, Colmenarejo, Guadarrama y Los Molinos. Juan I lo cedió a la familia de los Mendoza a finales del siglo XIV con quienes este territorio alcanzó su máximo esplendor en los siglos XV y XVI.
Ya en el reinado de Felipe II, Hoyo de Manzanares cumplió un importante papel en el suministro de materias primas para la nueva capital madrileña. Desde estos montes salían diariamente carros de transporte de leña para sus calderas y piedra para sus nuevas construcciones. Hoy en día aún queda patente la importancia que tuvieron estas actividades y pueden visitarse las antiguas canteras, actualmente cubiertas de agua y reconvertidas en espacios naturales.
Con Felipe IV este municipio fue incluido como destino de ocio del rey y su séquito, quienes practicaban en nuestro término municipal la caza del jabalí tal y como refleja la pintura conocida como Tela Real. Velázquez realizó este escena para la Galería del Rey de la Torre de la Parada. En ella Velázquez cuenta un hecho auténtico de la corte, refleja una batida de caza de jabalíes en el Serrejón, nombre por el que se conocía la Sierra de Hoyo.



A mediados del siglo XX, el municipio experimentó un auge de población de casi el 200% en apenas 10 años, pasando de 662 habitantes en 1940 a 1850 habitantes en 1950, posiblemente debido a la instalación de la Academia de Ingenieros del Ejército y al aumento de veraneantes que comenzaron a construir en Hoyo de Manzanares sus lugares de descanso veraniego atraídos por el contacto con la Naturaleza y el aire puro. Estas mismas características hicieron de Hoyo de Manzanares el lugar ideal para ubicar un sanatorio de tuberculosos a las afueras del pueblo, en el que estuvo ingresado Camilo José Cela en 1942.



Algo más tarde, en los años 70, Hoyo de Manzanares se convierte además en escenario de numerosas películas del oeste, al construirse aquí los primeros escenarios estables del Oeste de la España, conocidos con el nombre de Golden City. Esta actividad supuso un vuelco en el modo de vida de sus habitantes.
Hoy en día este municipio de 45,31 km2 pertenece en su totalidad al Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, catalogado como Reserva de la Biosfera y Lugar de Interés Comunitario por su riqueza medioambiental, razones que nos deben llevar a tener siempre presentes la importancia de su cuidado.
Si quieres descubrir más sobre la historia de Hoyo de Manzanares consulta la información que te ofrece el archivo municipal.
Te invitamos a conocer Hoyo de Manzanares, su casco urbano, con sus casas de piedra y el paisaje que lo envuelve, que encierra un tesoro detrás de cada esquina.