Decorados de cine. El poblado del Oeste, Golden City

Hubo un tiempo en el que Hoyo de Manzanares se convirtió en plató de producciones de cine centradas sobre todo en el género Western.

En el año 1962 se lleva a cabo la construcción de los primeros decorados del Oeste estables de Europa en Hoyo de Manzanares. Los decoradores Jaime Pérez Cubero y José Luis Galicia, a propuesta de los productores de cine Eduardo Manzanos y Arturo Marcos, empiezan a dar vida a los “decorados de Hoyo”.

Entre las más de 100 películas rodadas en Hoyo, una supuso un antes y un después en la historia, no solo de este pequeño lugar, también en la historia del propio cine, haciendo confluir a tres genios del cine: Ennio Morricone, Sergio Leone y Clint Eastwood, en un torno a una película rodada en lo que para ellos era un remoto pueblo de la desconocida España y en el que se vio nacer un nuevo género cinematográfico, el Spaguetti Western.

Decorados de cine en Hoyo de Manzanares

La decadencia del mítico poblado Golden City, privó a los vecinos y visitantes de una parte importante del patrimonio material e histórico local y regional, sin embargo, queda lo más importante, la memoria de lo que aquello fue, del impacto de la llegada del cine al pueblo, todo ello gracias a los testimonios de los vecinos y a las imborrables imágenes de las películas.

Ahora con las nuevas tecnologías se puede observar cómo eran los antiguos decorados Golden City de Hoyo de Manzanares en los que se grabó la película «Por un puñado de dólares». Gracias a la asociación HoyoCine y Spanish Western podemos hacer un recorrido por su calle principal, en sentido sur-norte  o en sentido norte-sur a través de estas reconstrucciones 3D

 

Cómo llegar

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Para acercarte a este paraje te recomendamos hacerlo andando, siguiendo las balizas de la Ruta Carboneros. Te llevará 30 minutos desde la Plaza Mayor de Hoyo de Manzanares o tan solo 20 si aparcas junto al panel de salida de la mencionada ruta.

Te desaconsejamos tratar de llegar en coche, ya que está prohibido el tránsito con vehículos de motor por los caminos de Hoyo, excepto para los propietarios de las fincas.